SANTO DOMINGO.-Considerado como el piano de América, el maestro Raúl Di Blasio ha tenido la oportunidad de aprender importantes lecciones en este tiempo de pandemia y, al mismo tiempo, ha logrado poner a correr su imaginación para convertirse en un artista más creativo.
Di Blasio reconoce que esta pandemia ha venido a poner a prueba la capacidad del ser humano para vivir en convivencia y ser más unidos, como la única forma de vencer obstáculos.
¿Cuál ha sido la lección más grande que le ha dejado esta pandemia?
No es individual, es una lección que comprobó que el hombre, el ser humano, tiene que vivir en comunidad. La única manera de vencer un obstáculo es uniéndose.
Y que tarde o temprano, la unión hace la fuerza, y para derrotar y para salir delante de una tragedia como la que nos tocó vivir mundial, me hizo comprobar que dependemos los unos de los otros.
En su tiempo de confinamiento, “qué fue lo que aprendió a valorar?
El valor de la familia, el valor del afecto, de la necesidad de estar comunicados, de valorar la compañía. No nos damos cuenta de la importancia de valorar la compañía, los momentos en familia; creemos que son naturales, cotidianos, no les dábamos importancia. Aprender a valorar eso, que el tiempo es fundamental, el tiempo que se vive en familia, con amigos.
¿Algo importante que la pandemia le ha robado?
Obviamente he dejado de disfrutar de algunos amigos queridos, aunque parezca una contradicción a lo mejor me ha quitado tiempo, pero también he ganado tiempo, depende como se mire, pero no podría decir que la pandemia me ha robado algo.
Sin dudas, no ha sido fácil poder superarlo, pero siempre uno mira al prójimo de nuevo y ve que hay mucha gente, millones de personas que están en condiciones inferiores o peores que las que pasa uno; por lo tanto, no puedo decir que me ha quitado o me ha robado algo importante, excepto las pérdidas de algunos seres queridos y amigos.
¿Ha tenido tiempo para producir música en medio de tantas desesperanzas?
Al terminar 2019 y comenzando 2020, cuando me encontraba celebrando mi cumpleaños, en noviembre 14 de 2019, alguien me dijo, pide un deseo, y le dije: me gustaría estar un tiempo tranquilo sin viajar, dedicado al piano, a la música, a la creación y pareciera que ese deseo lo hice tan fuerte o lo sentí tanto que cuando, dos o tres meses después, se decreta y se declara la pandemia al nivel mundial.Fuente el Dia
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